El mundo se encuentra en un punto crucial, sin precedentes. El cambio climático es una amenaza real y, sin embargo, el carbón consigue batir su máximo histórico de generación de energía, según indica un informe de Ember, grupo de expertos internacional sobre clima y energía, que data de marzo 2022.

Aunque el cambio climático está ocasionado por diversos factores, la principal causa son las emisiones procedentes de la quema de combustibles fósiles.  Reducir el consumo de este tipo de combustibles es urgente y esto debe incluir la toma de consciencia respecto a todos los recursos no renovables del planeta.

Países como Australia, Corea del Sur, China, Sudáfrica y los Estados Unidos, van a la cabeza en la emisión de CO2, acorde al informe de Ember. Mismos países que, a través del Acuerdo de París, se comprometieron a adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.

Actualmente, en la República Dominicana el 83 % de la energía se produce a través de combustibles fósiles. Mientras que solo el 10 % se genera a través de energías renovables variables (eólica, solar y biomasa) y un 7 % proviene de energía hidráulica, según datos de ASOFER.

Si hablamos de explotación minera, somos un país rico, principalmente en oro, plata, cobre, zinc y bauxita, además en roca caliza coralina, pero son recursos finitos, por lo que algunas compañías están buscando, mediante tecnología de punta, extender la vida útil de las minas.

Entonces, es necesario trazar una hoja de ruta donde la utilización responsable de los recursos debe constituirse como el elemento central del plan para asegurar un futuro sustentable, y donde estén alineados el sector público y privado hacia este objetivo.

Es indiscutible la contribución al equilibrio macroeconómico y el impulso a la competitividad de los sectores energía y minas.  Son una importante fuente de generación de empleo y, mientras resultan innegables las ventajas de la minería en términos impositivos y tecnológicos, la energía eléctrica se abre a la transición, hacia nuevas formas de generación que logren satisfacer la demanda y resolver las fallas en el suministro.

En una región particularmente vulnerable ante los efectos del cambio climático, las energías renovables hacen al país más resiliente ante eventos externos, ayudan a aumentar la seguridad e independencia energética, y estimulan el crecimiento sostenible. La construcción de esa resiliencia climática, identificando las debilidades y oportunidades de acción ante esta irrefutable realidad será clave para el desarrollo futuro de los países.

En esta edición, los principales actores de la energía y la minería en República Dominicana nos ofrecen un balance de la situación y un panorama a mediano plazo, donde el mercado dominicano muestra un creciente interés, tanto en el sector público como privado, en adoptar un modelo más eficientes y amigable con el medio ambiente, porque estamos obligados a pensar en el hoy, pero con la visión puesta  en el mañana.