El golf es la disciplina deportiva que genera mayores ingresos al Estado dominicano

Una industria en constante crecimiento, y fuente segura de trabajo a la sociedad. El principal destino de golf en la región, sus campos todos los años son galardonados por medios y revistas de alto prestigio.

 

A Willy Pumarol le apasiona enseñar el golf, cuenta con una certificación de la United States Teachers Golf Federation, producto de sus más de 15 mil horas dedicadas a la impartición de conocimientos y entrenamiento de este deporte.

Su transitar por el mundo golfístico ha sido multifacético, desde fundador de escuelas, director de proyectos turísticos relacionados con el golf, comentarista de TV para unos torneos de golf, editor de medios impresos, autor de libros, productor de manuales y, principalmente, el padre de una de las promesas del golf en la actualidad en República Dominicana, como lo es Willy Pumarol Jr., jugador del PGA Tour Latinoamérica.

El 30 veces jugador y entrenador en los equipos nacionales de RD, cuenta que su familia es 100% deportiva. “Mis hijos Jean André y Jean Marco, se inclinaron desde pequeños por los deportes de acción llegando a ser selección nacional de racquetbol y jugar tres mundiales juveniles, con el mérito que Jean Marco junto con Josué Perdomo le ganaron al poderoso equipo de USA, hecho que les valió ganar medalla de bronce en ese mundial”.

“El golf es parte de la tradición familiar y el amor a los deportes nos llena de entusiasmo a buscar la excelencia en cada faceta que incurrimos.  Nos apoyamos todos con alegría y firmeza. El trayecto de Willy Jr. hacia el PGA me ha enseñado enormemente a entrar en contacto con la élite de la enseñanza en esos niveles, y eso es una bendición.  Además, el poder asistirle como “Caddie” en algunos torneos del PGA Tour Latinoamérica, al igual que Jean Marco, han sido jornadas inolvidables. Jean André por su lado es profesional en mercadeo y trabaja en el área de desarrollo de software y seguridad cibernética en Madiatrix, mientras que Jean Marco es abogado con una maestría en derecho constitucional y trabaja en Newlink como Consultor Senior de Asuntos Públicos", añade con orgullo Pumarol.

 

¿Cómo fue ese primer encuentro que tuvo con el golf? ¿Lo recuerda? Nos podrías comentar alguna anécdota de ese momento.

Mi padre se inició en el golf tras dejar atrás el softball, me llevaba al SDCC los sábados y allí luego de cientos de zambullidos en la piscina y buscando nuevas aventuras, me acerqué al área del putting green a ver que hacían estas personas, golpeando una bola para meterla en un hoyo, y eso me llamó la atención, como hacerlo también y así empecé con mis primeros pasos en el putting green.

 

En su rol como maestro del golf, que se caracteriza por muchas horas de enseñanza impartidas. ¿Cuál es su método y filosofía para sus clases y poder transmitir sus conocimientos con los alumnos?

Mi enfoque apunta en hacerle entender al alumno que el swing de golf es la creación de un círculo constante, donde el esfuerzo de su rotación lo llevará a alcanzar la distancia exacta con cada palo. Sus manos juegan un papel clave en el swing. Al evaluar a cada jugador medimos su alcance y limitaciones físicas que se reflejan en la fuerza al pegarle a una bola de golf. Así iniciamos en crear una rutina de ejercicios de stretch para optimizar su “balance, estabilidad, fuerza y velocidad” al mejorar la flexibilidad en nuestro cuerpo. El primer objetivo es sacar la mejor versión de cada alumno buscando que pueda controlar la bola en todo momento hasta llegar hacer un swing fácil, repetible y al menor esfuerzo posible. En ese proceso repasamos los fundamentos claves del swing que son, un correcto grip y una buena postura del cuerpo, además de la posición de la bola en nuestros pies, y la correcta alineación de la cara del palo y el cuerpo hacia el objetivo. Y finalmente como rotar nuestras caderas, hombros, brazos y piernas en el back swing hasta pegar a la bola. Básicamente son los fundamentos del juego que los mejores jugadores viven puliendo todos los días en esta etapa donde la bola está más tiempo en el “aire”. La otra etapa del juego es cuando la bola está en el “green” y allí es donde entramos en otra dimensión. 

 

¿Cuáles consideras serían los pilares fundamentales para organizar buenos eventos de golf?

Tener objetivos claramente definidos. Que ese objetivo sea medible en el tiempo aterrizando con metas alcanzables, porque si se trazan objetivos no realistas es caminar al fracaso. Pienso que la meta debe ser muy relevante para la causa y poner una fecha de realización al proyecto con disciplina y un equipo de apoyo comprometido a la meta. Lo llamo meta SMART. Los torneos sociales en su mayoría llenan un vacío en nuestra sociedad que necesita de muchos recursos para subsistir. El golf posee los elementos para proveer esos recursos además de llevar aliento a muchos que no tienen mejores oportunidades. 

 

¿Cómo percibes la realidad actual del golf en República Dominicana? ¿Cómo la proyectas en un lustro?

Una industria en constante crecimiento que genera fuentes constantes y seguras de trabajo a la sociedad. Somos el principal destino de golf en la región, nuestros campos todos los años son galardonados por los principales medios, revistas de alto prestigio como Golf Digest, Golf Magazine, Travel & Leisure por mencionar algunas.

La IATGO que es la asociación internacional de tour operadores de golf más especializada del mundo, nos distingue y premia como destino mundial de golf de la región y uno de los principales en la industria. El golf como deporte es la disciplina que genera mayores ingresos al Estado dominicano. 

 

Hay un matrimonio entre el golf y el sector turístico, el cual genera muchos beneficios para el ámbito gubernamental y privado. ¿Cómo crees que se pudiera seguir solidificando más aún esta relación?

Trayendo torneos de clase mundial, ya tenemos el PGA Tour en el Corales Championships en Punta Cana Resort, el LAAC Latin American Amateur Championship en Casa de Campo, eventos que nos posicionan en el mapa mundial y comprometen al sector oficial a apoyar con recursos. El LPGA, CHAMPIONS Tour, DPW y ahora el LIV están en la mira de algunos y esos eventos seguirán fortaleciendo nuestra oferta turística como mejor destino para jugar y también venir a ver a los mejores jugadores de golf del mundo.

 

¿Qué sientes cuando ves a tu hijo desplegar su talento en un campo de golf?

Siento que Dios ha sido muy bueno con nosotros y nos confirma que él es real, que cuando ponemos metas alcanzables y las presentamos a él, nos abre nuevos caminos y pruebas para hacernos crecer. Siempre he sentido momentos de alta tensión en la cancha al verlo jugar y cuando esto pasa me apego al trabajo realizado de largos años, entonces sonrió y me llenó de gozo, humildad, comprensión, más paciencia y doy gracias otra vez por ser parte de esta historia.

El verlo caminando en  las canchas haciendo su mejor juego y entrega es maravilloso, porque me remonto a todas las personas que a mí me enseñaron a amar este gran juego, y gran parte ellos son también protagonistas en haberme enseñado esta pasión la cual yo también pasé a Willy Jr., personas como mi padre, Jack Corrie, Minin Soto, mi profesor Guillermo Gómez y luego Jimmy Stobs coach de Willy en la universidad en Barry University y todos sus coaches que han trabajado con él, cada uno es especial en este proceso de constante crecimiento, y representan una alta dosis de responsabilidad de su crecimiento actual a nivel global.

 

El Máster de Augusta es un ícono del golf. ¿Has tenido la oportunidad de presenciar o participar de alguna manera en este evento? ¿Cuál consideras es el significado más profundo de colocarse esa chaqueta verde?

Aún no he tenido el regalo de Dios de entrar a la cancha más bella del mundo, aunque creo me la conozco al pie de la letra por mis años de transmisión de los eventos del PGA Tour en Tv por Cable en RD, donde narré los torneos en Augusta por más de 10 años, pronto estaremos allá si es la voluntad de Dios siguiendo a Willy Jr. El ganar el Máster es convertirte en maestro de maestros del juego. Es el mayor sueño de todo jugador en el Tour, es ganarle a la crema del golf de ese año y te catapulta a la élite mundial. Es lo máximo. 

 

¿Cuál es la huella que quieres dejar al momento que decidas guardar los bastones?

Amor al juego de golf, basándose en entender sus principios y enseñanzas. Es el mejor juego que puedas realizar en cualquier etapa de tu vida. La humildad y el reto en cada tiro nos darán lecciones irrepetibles en la vida. Abrazar un proceso hacia la excelencia. 

 

¿Qué opinas de algunas iniciativas de entretenimiento que apuntan a popularizar el golf dentro de las nuevas generaciones, como es el caso de Top Golf?

Es lo mejor que le ha pasado al golf en los últimos años. Top Golf ha traído más de 23 millones de nuevos golfistas en USA con 67 spots y 7 fuera de USA. Ganancias aproximadas de más de 300 millones de dólares, una operación que genera más 35 mil visitantes por día en todas sus facilidades, por el hecho de combinar la práctica de nuevos jugadores por medio de competencias diseñadas para entretener al jugador y brindar un espacio perfecto para celebrar todo tipo de encuentro social, mezclándose las culturas con el deporte.