Debemos ver los desafíos no como obstáculos insuperables, sino como una ocasión para aprender, crecer y mejorar.

Como Psicóloga y como mujer líder, el propósito de Ana Westgeest es, ‘‘potenciar el capital humano en las organizaciones. Esto lo hago usualmente en mi rol de Maestra. Fui profesora en Secundaria y Universidad por más de 20 años. Me apasiona el aprendizaje y creo firmemente en desarrollar el potencial de cada Ejecutivo que conozco. Las habilidades blandas como empatía y servicio necesitan ser enseñadas en todo nivel jerárquico’’. 

 

Su experiencia como líder la define en tres palabras: Inspirar, enseñar, cuidar. ''Siento que como líder mi mayor legado ha sido el de “cuidar” a mi gente. Yo creo en un liderazgo empático e inspirador que enseñe (“show me”) que te importa con tu gente. Preguntar ¿cómo estás? ¿Cómo te sientes con X decisión? Y ¿cómo te puedo apoyar más allá del trabajo? Han sido mis pilares como líder y es lo que enseño a mis Coachees’’, expresa.

 

Ana expresa que afronta los desafios de ser una mujer lider al frente de una empresa apoyada de su familia, logrando el equilibrio vida-trabajo y formando una red de apoyo fuera de la empresa. ‘‘Un grupo, clan o colegas con quien compartir, inspirarme y seguir creciendo. Un estilo “mastermind” sirve como catarsis y apoyo a los retos de estrés y frustración ante posibles fracasos. La mujer necesita apoyo de sus “peers”. Yo en lo personal me apoyo en mis colegas Psicólogas y de RRHH que tienen retos similares a los míos’’. 

 

Su mensaje para las nuevas generaciones de mujeres líderes es claro: ‘‘No caigamos en “entitlement” - “me merezco X o Y” título o éxito. Necesitamos trabajar para ganarnos el éxito. Los latinos somos mucho de “es-que-zofrenia” (término acuñado en Saber de Panamá). “Es-que” no tenía tiempo; “Es - que” el gobierno no funciona; “Es - que” nadie me dijo; “Es - que” el reto es muy difícil. Siempre es una excusa echar la culpa hacia afuera. Si algo he aprendido es que los verdaderos líderes cambian el “es - que” por “a pesar de” transformando retos en oportunidades a través de la resiliencia. De esta manera, el éxito es inevitable con una mentalidad de persistencia. Las nuevas generaciones necesitan mantener hambre por el éxito y si hay desafíos sobrepasarlos en su mente, “sin quejarnos por lo que no tenemos / tuvimos”. 0 quejas; 0 es - que - zofrenia; 100% responsabilidad por el éxito colectivo Latino’’.