Toda comunicación tiene un nivel de contenido y uno de relación, por lo que, más allá de las palabras que utilicemos en un discurso, existe un significado más profundo, que es el que nosotros damos a estas palabras y oraciones, y que no necesariamente será interpretado del modo que queremos por el receptor del mensaje.

Una buena comunicación implica saber escuchar al otro. Si entiendes sus necesidades, entenderás sus intereses y podrás negociar cualquier cosa. Siendo un buen negociador, también serás un gran líder.

No es un secreto para nadie que toda compañía o proyecto que quiera dinamizar sus gestiones y procesos, necesitan de una comunicación con liderazgo.

El liderazgo comunicacional, no es más que comunicar, informar, conversar y escuchar como un líder, todas aquellas aristas dentro de un proyecto o empresa. Esto hace una diferencia contundente en la competencia por la calidad interna de su equipo humano.

Comunicar con liderazgo es contar con una apertura dentro del colectivo humano para alcanzar nuevas metas. Una empresa o proyecto consciente de sus procesos comunicativos internos, como su liderazgo para comunicarlo y ejercerlo, genera un equipo comprometido y empoderado para los retos del día a día.

Más allá de directrices, el líder es un inspirador que fija el rumbo hacía un futuro; motiva la dedicación individual; suscita compromisos en los seguidores; y tiene capacidad organizacional.

El líder es un comunicador innato y práctica, de manera constante, la escucha activa. Siempre sabrá negociar oportunamente las agendas. Debe de contar con la capacidad de comunicarse con un grupo de personas, para influir en sus emociones, con el fin de realizar guianza efectiva hacia el cumplimiento de un objetivo.

Existen pasos que se deben tomar en cuenta para un buen liderazgo comunicacional, entre ellos:

Recursos Humanos, liderarlos de manera efectiva, incluyendo la inteligencia emocional, la cual ayuda con la mejora continua a lo interno.

Optimizar las gestiones de las operaciones y responsabilidades, para un crecimiento continuo y efectivo.

Recibimiento del mensaje, es importante señalar que el éxito en una comunicación con liderazgo, depende de la manera en cómo el colaborador recibe el mensaje y no de la intención que haya tenido el líder al tratar de comunicarse.

Las empresas o el líder de un proyecto deben mantener, como necesidad, una comunicación constante con sus colaboradores.

De su parte, los líderes tienen que ser capaces de ayudar a que todo fluya de una manera natural, abierta; saber que pueden generar un cambio sin lastimar, ser capaces de transmitir la estrategia y visión propuesta. Cada líder posee funciones y capacidades específicas, por ende, la comunicación debe ser efectiva de ambas partes.

B. K Berger y J. Meng, en sus estudios: “Public Relations Practitioners and the Leadership Challenge”, proponen nueve principios para lograr la excelencia en el liderazgo en comunicación estratégica y concluyen que los líderes excelentes en relaciones públicas, deberían poseer las siguientes cualidades:

1) liderar con el ejemplo; 2) participar de forma efectiva y creíble en la toma de decisiones estratégicas dentro de la organización; 3) ejemplificar una fuerte orientación ética; 4) tener complejas habilidades comunicativas y retóricas; 5) disponer de un profundo autoconocimiento que les permita guiar con éxito todo tipo de interacciones, formación y relaciones, además del desarrollo personal; 6) disponer de un fuerte deseo de liderar; 7) utilizar estilos de liderazgo transformacionales e inclusivos, sensibles al medio ambiente y al entorno, además de las diferencias y las necesidades individuales; 8) demostrar pasión por el trabajo y la profesión, animando e inspirando a los demás, y 9) actuar como agentes de cambio, ayudando a crear una cultura de comunicación.

En resumen, sin comunicación, no puede haber liderazgo. No es secreto para nadie que la comunicación cuenta con un enorme poder en todos los sentidos que podría, en el peor de los casos, destruir fácilmente una empresa o proyecto; o fortalecerla y llevar a otro nivel.

Usemos el liderazgo y la comunicación para un fin adecuado en su uso, e influyamos, de manera positiva, para el crecimiento efectivo tanto en la forma, estructura del proyecto, como en el equipo.

Se necesita cambiar las distancias piramidales; se necesita un cambio de pensamiento; se necesita que una organización haga partícipe a sus integrantes.

Hunter J., dijo: “el liderazgo es el arte de influir sobre la gente para que trabaje con entusiasmo en la consecución de objetivos en pro del bien común”.