Hace siete años, un incendio forestal en el norte de Georgia arrasó 28.000 acres.  Otro incendio forestal obligó a evacuar Gatlinburg (Tennessee).  Gran parte del incendio de Georgia se produjo en terrenos del Servicio Forestal de EE.UU., lo que dificultó su extinción.

La Comisión Forestal de Georgia dirige gran parte de la respuesta en los incendios forestales del estado.  Sin embargo, según una auditoría publicada esta semana, las actualizaciones de la estrategia de la comisión forestal en materia de incendios forestales han sido lentas.

"Lo estamos haciendo bien aquí en Georgia. Nos lo estamos tomando en serio. Reconocemos el valor de nuestros bosques", declaró a 11Alive el director de la comisión forestal, Tim Lowrimore.

La auditoría explica que la agencia ha dado prioridad a la actualización de sus sistemas de extinción de incendios, pero ha tardado en reubicar permanentemente a los empleados en previsión de los focos.

También señala que la mayoría de los empleados de la comisión no tienen experiencia en la lucha contra incendios forestales.  

"Esto refleja la rotación de personal que tenemos como agencia", afirma Lowrimore.

La buena noticia es que los grandes incendios forestales siguen siendo poco frecuentes en Georgia, pero Lowrimore afirma que miles de incendios menores se extinguen cada año sin previo aviso.  Esto se debe a que la agencia ha aprendido a anticiparse a los incendios a partir de los datos meteorológicos.

"Tenemos más de 70 estaciones meteorológicas en todo el estado de las que recogemos datos a diario", explicó Lowrimore. "Y luego elaboramos modelos sobre cómo será el comportamiento y la previsión de incendios".

Lowrimore dijo que la auditoría confirma muchas de las cosas que la comisión forestal ya estaba haciendo para mejorar su capacidad de extinción de incendios - al tiempo que añade un poco de urgencia ante la inminencia de otra posible temporada de incendios.